Con un cuchillo, haz varios hoyos en la carne e inserta la mitad de la cantidad de ajo picado en cada hoyo. Sazona la carne con comino en polvo, sal y pimienta y luego báñala con el vino. Tápala bien y guárdala en la nevera de un día para otro. Si deseas la puede voltear cada 3 horas para que la marinada cubra toda la carne. Sácala de la nevera 30 minutos antes de cocinarla.

Calienta el aceite en una olla grande a fuego medio o medio alto. Agrega el azúcar o panela y revuelve hasta que se derrita y tome un color caramelo oscuro. Agrega la carne y séllala por todos lados.

Agrega la cebolla y el pimentón y cocínalos hasta que estén blandos. Luego, agrega el tomate, bebida de cola, salsa inglesa y suficiente agua para cubrirla hasta la mitad. Tapa la olla y deja que hierva a fuego alto. Luego reduce el fuego a medio bajo y cocínala por 2 horas o hasta que la carne esté lista.

Remueve la carne de la olla, déjala reposar por unos 10 minutos y luego córtala en rodajas.

Licúa la salsa (opcional) y prueba la sazón. Agrega más sal y pimienta si lo crees necesario para rectificar el sabor. Ahora, agrega las rodajas de carne a la salsa y cocina a fuego medio por 15-20 minutos más para que absorban el sabor de la salsa. Se puede servir con arroz con coco y patacones.